26 abril 2007
Mi boda!
Aunque no lo parezca, no fue una boda normal. Yo era una niña, por supuesto. Era el 21 de abril de 1979 (tiempo ha), me casé en la plaza del 2 de Mayo de Madrid, plaza que por aquél entonces estaba poblada por un montón de "progres", como entonces se les llamaba (en esos tiempos tenía un sentido distinto al que se le puede dar ahora), y entre los cuales, además, yo tenía a gala incluirme, no sé si con mucho o poco éxito. Los que hayan vivido esa época sabrán a qué me refiero cuando hablo de "progres", los demás, se lo imaginarán. Y si no, que pregunten, que pa eso estamos. No eran dados los progres a ceremonias del estilo de una boda como la que ese día iba a llevarse a cabo, ni mucho menos. Todo lo contrario. Más bien se respiraba una especie de gusto por la rebelión en cuanto a esos temas, ya se sabe, cuanto más alejados del sistema, mejor. Nada de trajes de novia, nada de bodas por la iglesia, nada de entrar por el aro, que fue lo que yo hice. Y por qué? Pues porque las circunstancias me llevaron a ello, y ya puestos, como además yo estaba enamoradísima, me daba igual de qué manera. El caso era irme a vivir con él, ya. Si tenía que ser así, pues así sería. Ni que decir tiene que yo no necesitaba una boda para eso. Más bien me traía al fresco. Pero Franco acababa de morirse, mi familia era una familia de lo más conservadora. Y me lo organizaron todo. Todo. El traje, la iglesia, el cura. También organizaron que no habría celebración. Por qué? Pues porque yo era una pecadora impenitente, y se acabó.
Así que hete aquí que yo hube de bajarme del coche de mi padre vestida de esa guisa, mientras los progres me miraban atónitos con sus vestimentas informales, con sus pelambreras largas, con el porrillo en la mano, con su guitarra por bandolera, y yo allí, muertecita de vergüenza, pero contenta.
El cura estaba un poco despistao, recuerdo. Acababa de tener un bautizo, y la neonata había recibido el nombre de Ana. Y así me bautizó a mí en ese día tan señalado. Y con Ana me quedé.
- Ana, quieres por esposo a...
Y yo por lo bajini:
-que no, que no me llamo Ana... María José, me llamo María José.
Pero ni por esas.
Además, no quería que mis amigos y hermanos y primos cantasen, y eso que iban ellos tan preparaditos con sus guitarras y sus partituras...
Pero cantaron.
Después salimos de la iglesia, como bien se ve en la foto, y nos cayó una buena lluvia de arroz, como mandan los cánones.
Pero después mi flamante marido y yo nos fuimos a Toledo directamente, en un tren lentísimo. A nuestra luna de miel (jejeje). A Toledo, sí. Ni más ni menos. Mientras mis amigos se iban de juerga a celebrarlo sin nosotros, lo cual me dejó así como un pelín mosqueada, pero al fin y al cabo ¡acababa de casarme!, era una menudencia sin importancia...
Tiempo ha de aquello, vive dios. Mucho ha llovido desde entonces.
Esto de que ponga aquí esta historia ha ocurrido porque andaba yo buscando una foto de mi primera comunión, por sugerencia de Vito, y no la he encontrado. Pero he topado a cambio con esta. Y con muchas más... (qué peligro)
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Buenísima historia. Recuerdo que tomando café con Cobre, Asir y conmigo nos contaste tu boda y algo de tu vida... Al final va a haber que hacer un fotoblog.
ResponderEliminarMuchos besos.
P.D. Nos vemos después de Londres ¿no?
¡Por tutatis! ¿y ahora la boda? será mejor que saque la foto de comunión antes que me de también por poner la boda.
ResponderEliminarLo de las ceremonias es un asunto sin importancia, tanto daría echar el puchero al aire...cuando se ama se quiere estar con el otro y ya está.
Muy bonita la foto, Ana, digo María José... jejejej
¡¡Besos!!
jaja, no te justifiques mujer, ¿quien no ha hecho alguna vez algo parecido? jajajaja. La diferencia es que tú eres valiente para contarlo.
ResponderEliminarMuchos besos.
reina , jajajaja ...que humor tienes para contarlo todo ...
ResponderEliminarpuès si estabas enamoradísima para que querías más ....
mira que me están entrando a mi unas ganas de buscar una foto de la boda .....
besitos
Nosotros también preferimos poner las fotos de primera comunión, pero al verdad es que nos gusta que hayas contado la historia.
ResponderEliminarBesos desde el agua
Contra Franco viviamos mejor...Y una duda; lo de Toledo ¿era el final del viaje, ó esque no aguantasteis mas? ji ji ji ji
ResponderEliminarQué historia tan bonita...me alegro de haberla leído :)
ResponderEliminar¡Que historia tan bonita!
ResponderEliminarLas bodas me enternecen, son mi pasión y delirio, es uno de los pocos actos sociales a los que me presto con devoción y alegría. Sea cual sea el lugar donde se celebre, el rito, el grado de parentesco o amistad, la estación del año, mis recursos, lo que sea, siempre que me invitan a una asisto, no hay nada que me pare ante una boda.
Felicidades y enhorabuena, por guardar tan grato recuerdo.
Saludos.