08 julio 2007

Y más caras.


Los polos deben estar derritiéndose muy deprisa, muy deprisa. Esta tarde han debido disminuir su tamaño considerablemente, a juzgar por el calor terrible que nos está castigando durante todo el día. Imagino los bosques quemándose, los árboles de muchos bosques envueltos en llamas, gritando de dolor.
Los dedos de mis manos se hinchan, los anillos me aprietan, mi nuca está chorreando de sudor. Siempre por donde más sudo es por la nuca, que debe ser mi punto débil. Mi casa se está ya calentando, y me temo que irá a más y más y más cada día de este verano, y me derretiré. Qué miedo me da el verano en Madrid, por dios! Sobre todo ahora que cada vez aguanto peor el calor, me marea, me ahoga, me siento pesada y enorme. Y sólo quiero descansar en un lugar fresquito al lado del agua. Mucha agua!
Como se puede ver yo no tengo aire acondicionado. Tengo un cacharro de esos que se les pone agua y son algo más que un ventilador, pero nada más. Y sirve sólo para una habitación, así que...
Con lo bien que se está en el patio de mi casa en verano. Con un libro tranquilamente. Me escaparé uno de estos días. Vaya que si!
Aquí tenemos otra vez a la pupas!

En el trabajo he encontrado un medio para distraerme y no volverme loca. Y son las caras. Dibujo caras mientras suelto mis frases como un disco rallao, mientras escucho a los clientes pedirme teléfonos, mientras busco los teléfonos. No hace falta prestar mucha atención. Es todo mecánico. Las frases que tengo que soltar salen solas, casi siempre en el momento oportuno. Bien es verdad que a veces confundo la llamada entrante con la anterior, pero la cosa no tiene mucha importancia...
-Disculpe, me dijo en Málaga, verdad?
-Pero qué Málaga ni qué Málaga! En Córdoba, le dije en Córdoba!
-Disculpe, en Córdoba. Sí por favor, dispongo de la información solicitada, tome nota por favor, el teléfono es...
-Perdone, no le he pedido el teléfono, sólo quiero saber la dirección.
-Sí por favor, la dirección quería decir, dispongo de la información solicitada, tome nota por favor, calle del Percebe, nº 13...

Son cosas sin importancia. Así, tranquilamente, entre dibujo y dibujo se me van pasando las horas mucho más levemente, aunque no quiere decir eso que no me desespere y que no me parezca que el día no acabará nunca, y que estoy en una cárcel, encerrada y atrapada y cuando llega la hora de salir tengo la sensación de que ha pasado una vida entera. Pero es mucho más llevadero, dónde va a parar...

5 comentarios:

  1. Puf, dímelo a mí (lo del calor), que salí a comer fuera y me acerqué a las rebajas... ¡EL HORROR!

    :)

    (Por cierto, muy chulas estas últimas caritas... muy Vogue...)

    ResponderEliminar
  2. La imagen nº1 corresponde a Robin Hood, la tercera a Sherlok Holmes, pero la segunda ni idea...
    ¿Cuantas respuestas tengo acertadas?, a ver: Uno dos tres responda otra vez, cucú cucú, cucú... :)

    ResponderEliminar
  3. Como sabes, te he copiado lo de las caras, aunque yo me he quedado en un ojo... de momento... ¡Qué calor hace hija!. Besos de agua.

    ResponderEliminar
  4. Pues aquí hace un fresquitoooo, cuando queráis os venís para acá que os hago sitio a todos.
    Algún día tenemos un poco más duro pero son los menos, me temo que para el invierno tendremos algún verano incrustado... ay...
    Venga mariajo que ya queda menos para esos diitas en la terraza ;)
    Besoss

    ResponderEliminar
  5. Anónimo5:11 p. m.

    Conforme aprieta el calor se quedan tus caras sin ojitos ¿Que pasa que solo te salen esquimales? ja ja ja ja
    Te regalaré un abanico, pero no de esos de los chinos no....uno guay

    ResponderEliminar